SUPERUGBY

CRUSADERS SE QUEDÓ CON EL BICAMPEÓNATO
La Franquicia de Nueva Zelanda venció a Lions por 37-18 y se consagró por segundo año consecutivo como el campeón del Personal Super Rugby.

Nueva Zelanda sigue demostrando que es el rey de este deporte. Y Crusaders, con muchos All Blacks en su plantel, que es uno de los invencibles del Personal Super Rugby. El equipo con sede en el AMI Stadium de Christchurch venció sin problemas a Lions (equipo que eliminó a Jaguares en los cuartos de final) por 37-18 y se consagró por segundo año consecutivo. Además, es el más ganador del torneo con nueve coronas.

Noveno título para la franquicia de Nueva Zelanda, y segundo bicampeonato: 1998, 1999, 2000, 2002, 2005, 2006, 2008, 2017 y 2018. Los Jaguares, que se metieron en cuartos de final por primera vez, cayeron ante los campeones en la octava semana del torneo: fue 40-14 en Vélez.

Se trató de una revancha de la final disputada el año último, aquella vez en Johannesburgo (25-17). Esta vez, el dominio de los neocelandeses fue total en todas las facetas del juego. Cuatro tries contra dos más la efectividad del apertura Richie Mo'unga llevaron al marcador la diferencia que existió en la cancha.

Crusaders llegaba como campeón defensor y ratificó ese rótulo a lo largo de toda la temporada. Perdió sólo dos partidos (contra Hurricanes y Highlanders) y cerró con 14 triunfos consecutivos. De local no pierde desde la temporada 2016.

Ganó la final con amplitud, dominó la temporada regular y es el máximo ganador. Crusaders, el mejor del Super Rugby.

Lions tuvo mayor posesión (56%) y jugó más tiempo en territorio rival (66%), pero Crusaders construyó la victoria a partir de su defensa agresiva y hermética. Los primeros 15 minutos fueron todo del equipo sudafricano, pero el local frustró cada uno de sus tres ataques profundos y sólo pudo sumar tres puntos con el pie. Además, lo neutralizó en sus armas más poderosas como el maul y el scrum. En la primera que tuvo, Crusaders elaboró una jugada letal, con varias fases, rápido movimiento de la pelota y penetraciones profundas hasta que llegó el try del wing Seta Tamanivalu. Esta lógica se repitió a lo largo del partido.

Liderados por el capitán Sam Whitelock y Kieran Read, Crusaders es el equipo que más jugadores aporta a los All Blacks. El apertura Richie Mo'unga tuvo un gran partido, la primera línea (Moody, Taylor, Francks) es de nivel mundial y tiene un buen mix de veteranos y jóvenes.

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